Ourense, 2 de octubre de 2024

Las ayudas de la Xunta por importe de 5,6 millones de euros para paliar los daños de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) se harán efectivas tras el fin del período de actividad del mosquito vector transmisor de la dolencia, que se estima que baje su incidencia a mediados de noviembre con el descenso de las temperaturas. Esto es, la tramitación de las resoluciones de las ayudas directas comenzará a partir de ese momento, cuando se constate que ya no hay casos activos de la dolencia. De esta forma, los fondos (cofinanciados por el Ministerio de Agricultura) podrán llegar a todas las explotaciones afectadas este año por la enfermedad, a mayores de las de 2023, cuestión importante y valorada tanto por el Gobierno gallego como por las organizaciones profesionales agrarias.

Así lo recordó este mediodía en Ourense la conselleira do Medio Rural, María José Gómez, tras reunirse, precisamente, con responsables de Asaga y Unións Agrarias, en una reunión en la que también participó el delegado territorial de la Xunta en la provincia, Manuel Pardo. Después de este encuentro de trabajo, la conselleira destacó que el sistema de reparto de las aportaciones será directo a los ganaderos, que solo deberán presentar una aceptación de la ayuda, sin necesidad de adjuntar ninguna otra documentación, agilizándose así al máximo la tramitación.

Además, Gómez puso en valor y agradeció la colaboración y disposición de ambas organizaciones agrarias para trabajar mano con mano con la Xunta, en estrecho contacto con los ganaderos, para hacer frente a esta situación. Así, destacó, fue posible elaborar una propuesta de ayudas que definió como la más ambiciosa de todas las comunidades autónomas.

Galicia, pionera en las indemnizaciones por muerte

En este mismo sentido, la conselleira recordó que Galicia fue pionera en habilitar, ya a comienzos de este año, la indemnización por los animales fallecidos, una medida con la que la Xunta abonó más de 200.000 euros. A mayores, recordó que desde que el Ministerio de Agricultura anunció, en mayo pasado, que iba a publicar un Real Decreto y transferir fondos a las autonomías, la Consellería le urgió celeridad para resolver un asunto que finalmente se hizo efectivo la semana pasada.

Fue a partir de la publicación de la dicha norma, y conocidos los criterios fijados por el Ministerio, cuando la Xunta pudo avanzar y dar certezas a los ganaderos con una propuesta de ayudas directas, tal y como explicó Gómez, quien incidió en que "no hay nadie más preocupado y ocupado con el bienestar, el cuidado y la sanidad de sus reses que los ganaderos". Por eso, añadió, la Xunta está ahí, como Administración responsable, para ?ayudar la que todos ellos sigan al frente de sus explotaciones y que todos aquellos que se incorporan sepan que también tienen su apoyo?.

Con esta medida, señaló la conselleira, será posible duplicar las cuantías por animal fallecido, con aportaciones de entre 400 y 1.600 euros, en función de la edad de las reses. También se sufragarán los tratamientos veterinarios y desinsectantes, acercando 20 euros por bovino censado, abonando el dinero por el total del censo de la explotación y no solo por los animales afectados, con un máximo de ayuda de hasta 4.000 euros por granja.

Lengua azul

Al tiempo, Gómez subrayó que "Galicia también fue pionera dentro de España en hacerse cargo de los costes de la vacuna de la lengua azul con nueve millones de euros aportados por la Consellería para que los ganaderos no hayan tenido que hacer frente a ese gasto" y afirmó que "seguimos trabajando para que dedicarse al sector primario sea siempre un buen plan de negocio".

De este modo, concluyó la conselleira, el Gobierno gallego continúa demostrando que está al lado de los ganaderos y reitera que seguirá trabajando a destajo para mantener el altísimo nivel sanitario de la cabaña ganadera de nuestra comunidad, que es un referente dentro de España en este ámbito.